Seis minutos como mucho es el tiempo que un trabajador de la compañía WaterSaver Faucet de Chicago puede gastar al día en ir al baño si no quieren ser sancionados.
Esta es la denuncia del sindicato Teamsters local 743 ante el Consejo Nacional de Relaciones Laborales, el cual asegura que dicha compañía sancionó con medidas disciplinarias a 19 trabajadores el pasado mes de junio por "uso excesivo" de los servicios, según informa la CNN.
La polémica surgió el invierno pasado cuando la empresa instaló un sistema de tarjetas magnéticas en los baños de la compañía de manera que así se pudiera controlar el tiempo que cada empleado usa en ir al cuarto de baño.
WaterSaver Faucet no ha desmentido dicha denuncia y justifica esta limitación asegurando que algunos empleados utilizaban demasiado tiempo en los servicios y no el suficiente en la línea de fabricación.
Steve Kersten, director ejecutivo de WaterSaver, dijo que se perdieron 120 horas de producción en mayo debido a las idas al baño fuera de los horarios de descanso previstos.
Sin embargo, además de las sanciones pertinentes, la compañía también ha instaurado un sistema de recompesas para aquellos trabajadores que no usen el baño durante su tiempo de trabajo. Este sistema consistiría en dar una tarjeta regalo de hasta 20 dólares cada mes para esos empleados que contengan sus necesidades.
Ante la denuncia del sindicato, la empresa asegura que a nadie se le prohíbe ir al baño, pero la creencia es que aquellos que lo usan fuera del tiempo de descanso (una hora en total al día) no lo hacen para cubrir sus necesidades si no para hablar por teléfono.
