martes, octubre 05, 2004

 

Deslocalización

Aunque no sé si la palabreja existe en el diccionario, esta es la palabra que designa el fenómeno por el cual las empresas se van de países "desarrollados" con costes altísimos a países "subdesarrollados" con bajos costes.

Hasta ahí, vale, porque ningún empresario es (ni se le supone) una ONG.

Pero según acabo de leer, no solo se queda ahí. Incluso la Iglesia utiliza esta práctica.

Parece ser que los estadounidenses en primer lugar, seguidos de cerca por europeos y canadienses, subcontratan sus oraciones en países como La India. Si, si, exacto. Las peticiones por los difuntos, por acción de gracias o simplemente la oración por la recuperación de un ser querido de este lado del mundo que usted ha pedido aquí puede que se realicen en La India.

Kerala es el estado que más peticiones recibe, pero no el único. En el instituto Dharmaram de Bangalore, el rector admite que recibe a menudo intenciones para la misa desde el extranjero. Es él quien las distribuye entre los cincuenta curas de su seminario.

Como nada es gratis en esta vida, por cada una de estas misas se paga una cantidad que va entre cinco y diez dólares (en calidad de "donativos" a la iglesia). Este dinero es bienvenido por los curas locales, como un suplemento a su sueldo.

Así lo comenta el obispo de la diócesis de Ernakulam-Angamaly, que recibe una media mensual de trescientas cincuenta peticiones, las cuales pasa a los sacerdotes que más lo necesitan. De esta forma se benefician de esta ayuda.

Para pedir una misa a distancia, son los obispos, el vaticano o las órdenes religiosas quienes lo hacen, utilizando para ello el correo (electrónico o no) o un intermediario (generalmente sacerdotes que se desplazan allí).

<http://sify.com/news/othernews/fullstory.php?id=13498514>

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