jueves, febrero 03, 2005

 

Se puede probar en casa

Lo leí hace poco en la edición digital de la revista "Muy Interesante", y me pareció relamente curioso.

Parece ser que en Praga, en 1949, un tal Drbal solicitó la patente de un dispositivo en forma piramidal destinado a conservar el filo de las hojas de afeitar. Había descubierto que podía usar doscientas veces la misma hoja si la guardaba en un estuche de cartulina con forma de pirámide.

Los propios empleados de la oficina de patentes pudieron comprobarlo, pero resultaba tan inexplicable que tardaron diez años en aceptar su solicitud.

Durante ese tiempo, Drbal siguió investigando y consiguió demostrar que en el interior de la estructura piramidal se produce un peculiar efecto de resonancia energética, que actúa sobre la materia inorgánica y sobre la orgánica, produciendo la deshidratación profunda del objeto expuesto.

Una flor cortada, por tanto, se seca mucho antes y de otro modo cuando se mantiene en el interior de una pirámide.

Es bonito saber que todavía hay cosas por ahí capaces de sorprendernos...

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